Sus guionistas se basaron en una experiencia real, la del minero Luis Castro y en las marchas mineras de Asturias y León de 1990 hasta 1998.
Ante el cierre de un pozo que en la ficción vive un dramático accidente mortal que supondrá su cierre (nuestro pozo Tres Amigos), los mineros se ven obligados a aceptar las ayudas ofrecidas por el gobierno como contraprestación al cierre de la mina.
Fidel ( Resines) minero asturiano, tras el cierre de esta mina en la que trabaja, se ve en la calle y sin un duro. Ante esta dura situación, decide que, como español que es y en atención a lo que es la Constitución, tiene derecho a un trabajo digno. Pero, ¿a quien se lo va a decir? Pues, evidentemente, al Rey. De tal modo que embarca a su mujer (Adriana Ozores) y a su hijo de corta edad, en una aventura que les llevará a píe hasta Madrid para que el Rey lo reciba y haga cumplir lo que dicta la Constitución: su derecho a un trabajo digno, no quiere vivir de ayudas, reduciendo su existencia a un subsidio. No incide la historia en la problemática que genera el desempleo (como hace Los Lunes al sol), sino en contar de una manera amena y divertida, las peripecias que Fidel y su familia sufren en sus carnes camino a Madrid por el arcén de las carreteras.
Y ciñéndonos exclusivamente al Pozo Tres Amigos, seguro que muchos recordareis, algunos lo vivisteis en primera persona, o bien trabajando o bien actuando como extras, aquel sábado 19 de Junio en que en el embarque del pozo lleno de mineros la jaula llega al exterior y al abrirse las portillas salen los mineros llevando la camilla con un compañero muerto. El silencio sobrecoge. A alguno de los extras les ha tocado pasar alguna vez en la vida real por este trago. Cuando una de las actrices grita desgarrada "¡Puta mina!" las lágrimas empañan los ojos de los presentes. El que menos está respigado. Y es que los enfermeros son los propios del pozo. Los que hacen de mineros lo siguen siendo o están prejubilados.
Por la tarde se rueda la escena que abre la película: un mitin en la boca del pozo del sindicalista Bonilla. Su voz truena en el embarque: "¡Yo os prometo una cosa: tendrán que pasar por encima de mi cadáver antes de que cierre un solo pozo, compañeros!" A los mineros presentes una vez mas se les pone un nudo en la garganta.
El domingo 20, segundo día de rodaje en el Pozo. Se va a proceder al corte del cable de la jaula. La mina cierra. Esas imágenes seguro que os recuerdan las que todos hemos ido viendo en la prensa relativas al por desgracia cierre de muchos centros de trabajo de esta Empresa (podéis leer al respecto el articulo "Hunosa: Cronología de una cadena de cierres" en este blog) .Un cordón de fuerzas antidisturbios custodia las instalaciones. Un grupo de mineros se enfrenta a ellos con piedras y cohetes. Las escenas son tan reales que la tensión se palpa en el ambiente. El cable se corta. Los mineros entienden este hecho como irreversible y finalizan los enfrentamientos. Uno de ellos avanza y entona el Santa Bárbara bendita. Era José Ramón Ordóñez, cantante de los Stukas a la vez que minero (hoy ya fallecido). El resto de mineros se le van uniendo, seguro que reconocéis a muchos de ellos.
Este video resume todas esas imágenes y sensaciones que se vivieron aquellos días. Algunos de los que aparecen, como hemos dicho ya no están entre nosotros, nuestro mas emotivo y sincero recuerdo para ellos.
(Nuestro agradecimiento a Ismael Gonzalez Arias que amablemente nos ha cedido las fotos)